24 septiembre 2007

RIS

Dicen que esta serie es una franquicia de una italiana llamada RIS y tú te lo crees, pero claro, esa serie es de 2005, así que cuando ves una serie de policía científica y te encuentras con un cuarentón como jefe, y un equipo formado por una rubia, una morena, y dos estupendos señores, por más que te cuenten historias, se te viene a la cabeza otra sigla bien distinta.

Videomedia, productoria de RIS, ha dicho que estamos en un momento en que las series de policías están de moda y atención a la frase "Ahora toca una revisión del género policíaco". RE-VI-SIÓN sí. Eso dicen.

Pongamos que sí, que es verdad que están de moda. Entonces tenemos en la misma cadena dos días seguidos, dos series iguales. El domingo un capítulo de RIS y el lunes dos capítulos seguidos de CSI. No hay moda que aguante eso, ni espectador con tanta paciencia. No sé a quien se le ocurrió, lo que está claro es que Videomedia ha sabido vender su producto, y Telecinco no sabía ni lo que estaba comprando. Ya que lo han hecho ¿por qué no lo hicieron bien? Podrían haber puesto las dos series el lunes, una detrás de la otra. La española y la americana. Al menos es una estrategia más razonable.

Dicen en todos los foros, que las series españolas lo que son es más cercanas. Por eso nos gustan más. La gente quiere escuchar su propio idioma y ver a su gente. Yo eso solo me lo creo si hablamos de productos como Los serrano. Es bastante más probable que una familia española se sienta más identificada con Los serrano que con la familia de 5 hermanos (me lo creo aunque no estoy de acuerdo, cualquier personaje de cualquier serie americana es más real que cualquiera de Los serrano). Pero no me lo creo de Génesis, de Cuenta atrás y de RIS. Son personajes tan irreales, tan mentirosos, tan poco españoles que no puedo entender que nadie se crea nada.


Vamos con RIS, resulta que la serie empieza y tú no puedes evitar abrir la boca de par en par. La imagen es impresionante. El ritmo es brutal. Está cuidadísima la planificación. Todo empieza con una cuenta atrás, como parece que está de moda. Una bomba va a explotar y una chica está en peligro. Jose Coronado llega en el momento justo, coge a la chica pero la bomba explota, no se sabe si están vivos o muertos pero damos un salto en el tiempo, tres meses antes.

En ese momento la misma chica llega a las instalaciones de RIS, es nueva en el cuerpo y le presentan a todos sus compañeros. La oficina es como el interior de una nave nodriza. La dirección artística y la fotografía son realmente impresionantes. Entonces piensas, vaya, sí que se lo han currado. Esta vez nadie va a poder echar la culpa a los sucedáneos, si el capítulo está mal solo puede ser culpa de una cosa: el guión.

Y eso ha sido. El guión no está a la altura. Es más, no levanta ni un palmo. Les cuento. La presentación de los personajes y la relación entre ellos está bien. Hay mucho de CSI porque los personajes no necesitan estar bien definidos, tardamos muchos capítulos en entender de verdad cómo es Grissom y de sus dos mujeres poco sabemos hasta bien entrada la primera temporada. Pero son series en que realmente la vida de sus personajes es algo accesorio. A mí no me importa cómo son Michelle y Tony Almeida. Solo me interesa si Almeida va a cubrir a Jack o no. De Grissom solo necesito saber si sabe encontrar o no pelos en las uñas de las víctimas. Lo que haga en su casa me da igual. De House también tardamos mucho en saber que toca la guitarra en sus ratos libres. Lo más importante en este tipo de series es el caso. La manera de actuar de estos personajes a la hora de resolver crímenes.

En este sentido está bien, los estereotipos están todos en su sitio. La novata que se va haciendo un sitio en el equipo. El jefe que entre caso y caso juega al ajedrez con su mentor. El experto en balística que además es un salido, el químico timidete, la novia del jefe que casualmente es la médico forense, nada nuevo bajo el sol. Que Coronado juegue con la novata y no se sepa si realmente está interesado en ella como mujer, si pasa de ella o si hace que pasa para hacerla más fuerte, son errores que no se deben al guión (bueno, un poco sí) sino a pequeños detalles de dirección y por supuesto a la interpretación del actor.

La primera vez que vemos a Coronado es en la escena del crimen. Hay una muerta y de pronto aparece su superior con la novata. Coronado le recrimina a su jefe que haya venido con la chica, no está el horno para bollos. Sin embargo, luego hay un plano de Coronado de pie observando a la chica que mareada, se ha asomado al puente. Él deja a la muerta, se levanta, va hacia ella y hace un chiste "si vomitas que no sea aquí, que me ensucias la escena del crimen". Así que no se sabe si la chica le molesta, si le pone, si se ha enamorado al verla marearse, y claro... el personaje que intenta ser un poco seco, ya no lo es tanto (estoy convencida de que en el guión el personaje tenía mucho más de Grissom que del ligón en que lo ha convertido Coronado sin pretenderlo).

Pero bueno, que todo eso está bien. Está tan bien la imagen, que uno se olvida de que a veces los actores no lo están tanto (sobre todo cuando tienen que soltar esas parrafadas tan largas sobre cloruros y fosfatos). Pero claro, por más que todo eso sea estupendo, cuando viene el meollo, es decir las tramas, es cuando empieza la serie. Y aquí es cuando RIS se va a la mierda.

Hay dos tramas, una de ellas es de un asesino en serie que mata a sus víctimas destrozándoles la cara y la otra es de un cura que muere mientras da la misa (no podían haber elegido una trama peor y eso que sabían hace meses que se iba a estrenar Quart). La trama del cura es tan mala, y se soluciona tan rápido que no hace falta ni nombrarla. No tiene el menor interés así que cuando aparece te aburres y quieres volver a la otra. Resulta que en la escena del crimen encuentran una flor dentro del cuerpo de la víctima y la novata encuentra un cacho de una tarjeta de visita. Como la chica es experta en informática descubre en un plis plas la página web del sitio de la tarjeta, se trata de un vivero. En el mismo momento, el químico busca en una enciclopedia de flores, los pétalos coinciden con una flor llamada "bella de noche".

Todo esto dura un suspiro. Han encontrado la flor y ya saben de donde ha salido. La cosa es que así no tiene gracia. En CSI lo que mola es ver como consiguen encontrar una información de algo mínimo. Pero todo se desmorona si me pones en la escena del crimen un trozo de una tarjeta de visita. ¿¿¿Qué clase de persona compra flores y se lleva una tarjeta de visita???? Así cualquiera investiga crímenes. Búscate otra cosa, pero en una serie así lo más importante es el TRABAJO DE LA POLICÍA CIENTÍFICA. Si al asesino se le cae la tarjeta de visita ¿dónde está la gracia? (todo esto de la tarjeta de visita me lo tuvieron que contar porque yo no me enteré, fue todo tan rápido que yo no sabía lo que habían encontrado y no entendí como llegaron a la web del vivero).

Coronado y la novata van al vivero y los atiende el jardinero. Es probable que el jardinero sea el asesino, porque en estas series siempre es quien menos te esperas. Pero si coges y me pones un plano en contrapicado del jardinero entonces no tiene pérdida. Es él. UN TESTIGO nunca puede tener un plano para él solo, a lo sumo con escorzo y en plano y contraplano, ¿pero un solo plano para él? ¡¡¡¡es el asesino fijo!!!!

Bien, la cosa es que en la segunda escena del crimen aparece el envoltorio de una chocolatina con un chicle usado dentro. El chicle es de la víctima, así que llegan a la conclusión de que el asesino le dio a la muerta una chocolatina. De pronto viene uno y dice "sabemos donde se compró la chocolatina". No solo saben el lugar, también ¡la máquina expendedora! ¡Es en un manicomio! ¡¡¡Debe ser la fabrica de chocolatinas menos rentable del planeta!!!! Vende 5 al mes y todas al mismo sitio. ¿Pero a quién se le ocurre? Parecen guiones escrito por niños. Además vuelvo a lo de antes, en una serie así no importa qué hace esta gente en el lugar del crimen, lo que importa, porque estamos en la policía científica, es el proceso. Quiero saber cómo estudian esa chocolatina para llegar a esa conclusión, no lo que hacen más tarde en el manicomio.

La resolución del capítulo también deja mucho que desear. No se imaginan lo que cantaba la sangre de la chica, eso era peor que el sirope de fresa del Mcdonalds. Yo no puedo entender por qué no se puede hacer una serie en la que todos los aspectos estén bien. Prefiero que todo sea bueno, a que dirección y fotografía sean maravillosos y el resto malo.

Claro que luego dirán, es que los siguientes capítulos están mejor. Las tramas están más cuidadas. No me extraña. Lo difícil es hacerlo peor. La cuestión es ¿el público cuántas oportunidades da? La cosa es que RIS fue muy aburrida. Y no hay factura visual que pueda con eso.

12 comentarios:

SisterBoy dijo...

¿Cual es el nombre completo de la serie? Quiero bajarme los capis de ayer pero como no sea más concreto me parece

Deckard dijo...

Parece que es RIS científica. En tusseries ya está el elink.

Lo de la chocolatina es para nota, sobre todo teniendo el móvil encendido de la chica, con eso se la puede localizar en un visto y no visto.

Para mí fue tediosa, aunque con lo de las gafas de sol parece que se apuntan a la onda Horatio Caine.

(!) hombre perplejo dijo...

¡Qué razón tienes! Y las frases lapidarias de Coronado eran para eso: ¡para lapidarlo allí mismo!

Mer dijo...

Yo no sé si se puede localizar a la chica por el móvil y tampoco sé si es posible coger el papel de una chocolatina y descubrir de qué máquina salió. No tengo por qué saber eso, pero no puede parecerme inverosímil. La gracia de esto es ver como encuentran el lote del producto, como contactan con la fábrica y como llegan a la conclusión que la chocolatina está en ese preciso lugar.

Anónimo dijo...

Al igual que el momento "lígate al asesino por chat". Comienzan la conversación, y a la tercera línea la chica es la que quiere conocerle. ¡¡¡Y el asesino, al parecer asiduo a chats heterosexuales no sospecha nada!!! Cualquiera que haya chateado diez minutos sabe que una tía que a la tercera línea quiere conocer al tío es otro hombre que le quiere tomar el pelo.

También me encantó cómo Griss... digo Coronado llega a la conclusión de que el asesino es más listo que su sospechoso, que va a repetir, que tiene problemas de erección y rollos freudianos con la madre sólo viendo la foto de los ojos del cadáver. ¡¡Y sueltan al sospechoso al que habían detenido con pruebas por el pálpito del jefe!!

Aunque lo que de verdad me mató de vergüenza ajena fue el intento de imitación de las frases lapidarias de Horatio que nunca vienen a cuento:
Señor del Vivero.- Este tipo de flor no es demasiado cara.
Grissonado.- ¿acaso la belleza tiene precio?
Amosnomejodas!!!!

Mer dijo...

Yo es que no he visto nunca otro CSI que no sea el de Las vegas, que con ese me parecía suficiente. Y tampoco creas que lo soporto mucho, me ponen histérica las chicas que van a inspeccionar cadáveres tan maquilladas como las dependientas del corte inglés.

Editor dijo...

Sinceramente, lo pero es la duración del capítulo (¿por qué en España cualquier serie es eterna?). Nos podemos meter con actores, guiones, situaciones inverosímiles, lo que sea, pero es que ningún guionista (y fijo que encima estos son becarios) aguanta hacer el guión de una película cada semana en el que además tiene que tener en cuenta no contarlo todo en un sólo capítulo. Al final lo llenan con pajas mentales que no van a ningún lado... A mí personalemnte es que me desesperan...

Pedro dijo...

Disiento en lo de la proximidad de los personajes en las series españolas, y lo peor es que me voy a poner pedante, perdón.
Leí en algún sitio refiriéndose a Los Soprano decir que era un estudio sobre la condición humana. Yo me llego a identificar en aspectos de Tony Soprano muchísimo más que en este Jose Coronado. A los personajes cuando se les da cuerpo en guión y son bien dirigidos da igual si son españoles o malayos.

Mer dijo...

Lo de la proximidad de los personajes lo decía irónicamente. Yo jamás he defendido eso en este blog. En España cuesta definir personajes, tanto en cine como en tele.

Editor dijo...

El principal problema no es cuánto se define un personaje en España, sino el propio personaje. Me explico: Tanto en las series españolas como en las películas, no hay un personaje normal. Todos tienen taras familiares, personales, físicas o mentales enormes. Cuesta mucho creer que sean personajes normales con sus blancos, sus grises y sus negros, capaces de llevar una vida y un trabajo normal en circunstancias normales. Porque parece que seguir la vida de un personaje así no le interesa a nadie en este país y es preferible no explicar los motivos que le llevan a ser como es, que simplemente lanzarlo el aire y a ver qué se les ocurre hacer con él. Risa me daría a mí pedir que algún guionista me enseñase la "biblia" de una serie de televisión en España para ver si se han planteado alguna evolución en los personajes. Bueno, si es que existen "biblias" en este país...

Esquizofrénico dijo...

No voy a opinar mucho más. Lo que pensaba de RIS ya lo coloqué en mi blog (http://diariodeunesquizofrenico.blogspot.com/2007/09/cuando-el-malo-es-un-cafre.html).

Pero añadiré que estoy de acuerdo con muchas de tus afirmaciones, salvo en qué no necesitemos saber más cosas de personajes como Grissom. Uno de los principales fallos (subjetivamente hablando, por descontado) es que el tremendo desequilibrio entre tramas profesionales (todas) y las personales y emocionales (prácticamente ninguna). Incluso cuando aparecen (en CSI, digo), como por ejemplo la habitación de hotel con Grissom y Sara compartiendo un "affaire", se quedan en nada: no nos explican ni el porqué se llega a eso, ni el cómo, ni sus consecuencias (que al parecer no las hay).
En cuanto a RIS, insoportable, por predecible y tópica, aunque está magníficamente realizada.

Unknown dijo...

Está claro que RIS es un pestiño de aúpa que se va deshinchando a medida que avanzan los capítulos.

Al estante de series de culto de la casa Coronado, junto a Código Fuego y Los 80.