28 febrero 2008

Polvo de superestrellas

Imagino que todos sabrán quién es Jimmy Kimmel. E imagino que también sabrán con quién ha follado. Pero por si acaso se los cuento. Jimmy Kimmel tiene su propio show en la cadena ABC, su novia es Sarah Silverman, una conocida cómica, y en su programa, durante meses se dedicó a hacer una broma a Matt Damon. Cada vez que terminaba el programa pedía perdón al actor por no haber podido entrevistarlo por falta de tiempo.

Matt Damon llegó incluso a acudir al programa y claro, no hubo entrevista.



La venganza del actor tenía que llegar, así que junto con la novia del cómico perpetraron este video:



Y poco después llegó la fantástica contra venganza. Una oda a la parodia, al sentido del humor y a la comedia inteligente.



Y no, con el título del post no dejo intuir que pienso que plagiaron mi Polvo de estrellas.

Pero me hace ilusión sentirme de alguna manera tan cercana a toda esta gente. Al menos sé que mi estilo de humor va bien encaminado.

Visto en: Canal TCM

25 febrero 2008

Oscar 2008

Debo reconocer que me da un poco de pereza escribir esta entrada porque la gala de ayer no fue demasiado interesante. Y cuando una dice interesante se refiere a pifias, caídas, meteduras de pata, trajes ridículos. La verdad que tanto en el plus como en Hollywood la cosa fue bastante sosa.

Con respecto a la emisión del plus, no quiero repetirme porque todos los años digo lo mismo, pero por Dios, esos traductores ¡basta ya! ¿Para cuando unos buenos subtítulos? Esta vez encima bajaron el volumen de la ceremonia para que las voces de sus traductores se oyeran bien. Para que se oyera bien que a Pozos de Ambición la llamaban Pozos de Perdición. Para que oyeramos bien que no tienen ni idea de qué películas están hablando ni de qué actores salen, ni de qué directores las dirigen.


¿Qué significa este pelo?

Y esto era cosa del plus, porque en cuanto cambiábamos a versión original se escuchaba a volumen normal. Así que lo de anoche fue peor que nunca porque ni siquiera podíamos intuir el sentido de las frases originales.

Lo de Antonio Muñoz de Mesa en los Ideal de verdad que no merece comentarios. Vamos a la gala que es lo único importante.

Tema trajes. Todas de negro. Divinas sí, pero todas iguales. ¿Por qué hacen estas cosas? ¿Las pobres actrices saben que va a pasar esto? los diseñadores en cambio saben de sobra que todo Dios va a ir del mismo color.

No sé si es por lo bien que me cae, pero Jennifer Garner me encantó, qué elegante, qué guapa y qué humilde "Yo siempre voy en vaqueros, el mérito lo tiene mi etilista".



Penélope estaba bellísima. Calista Flockhart también iba muy guapa. La que es un horror es Tilda Swinton, tiene una cabeza pequeñita y un cuerpo enorme, pero pegué un grito cuando dijeron su nombre porque en Michael Clayton está fantástica.



Colin Farrell no puede ser más hortera. Lo amo, pero las cosas como son. A Nicole Kidman los labios se le han deformado, ahora la parte derecha está un cm. más alta que la izquierda.


Ya es oficialmente un maniquí

Kery Russell también estaba horrible con un vestido de esos que hacen el pecho pequeñito, que además la hacía parecer mucho más delgada.



Pero si tengo que darle el premio a la peor vestida, tiene que ser a Diablo Cody, porque una no puede ser stripper e ir cerrándose el vestido para que no se le vean las bragas. Si te vistes así, asúmelo con todas las consecuencias. Ha sido un jarro de agua fría. Nos esperábamos mucho más.


Diablo Cody, la stripper vergonzosa

Por cierto, todo el discurso de Jon Stewart fue fantástico. Sus gritos contra la guerra de Irak, su apoyo al partido demócrata... "Dentro de poco podremos tener un presidente negro o una presidenta mujer, cuando pasa eso un meteorito está a punto de caer sobre la Tierra".

Pero la mejor frase fue a Diablo Cody "Una stripper que se pasó a guionista. Espero que lleves bien la reducción de sueldo".



Solté una carcajada cuando se metió con Angelina Jolie y su camada de hijos, porque yo soy pro Jennifer y nosotras podremos perdonar, pero olvidar jamás. ¿Ese gag fue improvisado? Se los cuento por si no han visto la gala. Resulta que sale Cate Blanchett embarazada, muchísimo más guapa que el año pasado, que estaba transparente y un rato después Jessica Alba divina también. El presentador nos cuenta que también está embarazada. Al rato anuncia que en la sala hay más mujeres embarazadas, la otra es Nicole Kidman (a ésta sin embargo no se le notaba nada) y avisa que la cosa puede ir a peor porque Jack Nicholson está cerca y la noche es joven. Jeje, no, éste no era el chiste. Entonces imita una entrega de premios, ponen en pantalla la imagen de las tres mujeres, Jon Stewart saca el sobre y lee "Y el niño es para Angelina Jolie!". jijijiji. Argh, la odio.

Sobre los premios... yo me puse muy contenta por todos, creo que No es país para viejos era la mejor película y además una película extraña y rompedora. Pero ya se veía venir que el resultado iba a ser positivo porque todas las demás eran estupendas y se salían de lo normal. Este ha sido un año histórico por todo. Por lo de Bardem por supuesto, pero sobre todo porque por primera vez sentimos que se había hecho justicia, que el buen cine sería recompensado. Y para vivir momentos como éste vale la pena pasar la noche en vela soportando a Figueras y esas cinco canciones infernales.



Más fotos aquí.

Actualización:

En la Fiesta de Elton John sí que estaban todos guapos. Mi favorita Sharon Stone.

18 febrero 2008

Freaks and Geeks

No me extraña nada que esta serie se haya estrenado en España como Instituto McKinley, supongo que los traductores se quedaron sin ideas porque en España eso del argot lo llevamos bastante mal.

Aquí un friki no es un freak y un geek ni siquiera sabemos lo que es. Así que todo es un caos. La serie debería haberse llamado Bichos raros y empollones, pero claro, desde el punto de vista del marketing, es un desastre.

Allí tienen tantos términos que no me extraña que no se quieran sentar juntos para comer. El nerd por ejemplo es el empollón tecnológico, un tipo bastante retraído que te arregla el ordenador en un plis plas, el geek sin embargo es el empollón friki, el que queda con sus amigos para jugar al rol y tiene una espada laser que le costó 360 euros. El dork es el pardillo, ese gilipollas con el que nadie quiere que lo vean hablando por los pasillos. Y los freaks son los bichos raros, los heavies, los punkies, los siniestros... El resto es la gente guay. O sea, los que están en el equipo de football. Y en España han decidido a todos estos llamarlos frikis. Y claro, nos liamos.


Pero vamos por partes.

El origen

Paul Feig era un geek de familia cristiana y conservadora. Sus años de instituto allá por los 80 fueron un infierno y el tío podía haber elegido borrarlo todo de su memoria, pero sin embargo optó por la catarsis, hizo series, películas y libros contando sus penas y convirtiéndose en el abanderado de un grupo de gente que mueve los hilos de la comedia universal.

Judd Apatow, un poco más joven (y bajito) que Feig, era otro geek pero su familia era mucho más progresista, tanto que cada uno de sus hermanos vivía en una casa diferente con un padre distinto. La cosa es que sus padres amaban la comedia y en este caso la religión que practicaba la familia se llamaba Steve Martin. Con un hijo tan bajito, gracioso y poco agraciado la cosa tenía que desembocar en el show business. A los 20 años escribía chistes para Ben Stiller, y antes de los 30 había sido nominado a seis Emmys por dirigir El show de Larry Sanders.

Cuando estos hombres se juntaron para hacer Freaks & Geeks en el 99 seguramente no tenían ni idea de que estaban haciendo historia.

Freaks & Geeks es una serie de la NBC cancelada en su primera temporada. Algo bastante doloroso teniendo en cuenta lo estupenda que era. Sin embargo una se pregunta ¿Qué hubiera pasado de haber seguido adelante? ¿Y si la cadena hubiera pedido cambios para incrementar la audiencia? Fue mejor no saberlo.

La historia

La serie se desarrolla en los 80. Lindsay y Sam Weir son hermanos. Ella es la mayor y está pasando por una crisis de personalidad. Está harta de ser una Geek, de participar en las olimpiadas de matemáticas y de sentarse con sus amigas a hablar de los deberes de química. Así que decide juntarse con el grupo de los freaks, unos desalmados amantes de Led Zeppelin que no estudian, no tienen inquietudes y no hacen más que meterse en problemas.

Los amigos de Sam, Neal y Bill forman el equipo Geek. Ellos no se plantean cambiar, simplemente viven con su etiqueta como pueden.

Cada capítulo de la serie se estructura en dos tramas, la de los freaks y la de los geeks. Las historias son independientes, salvo excepciones, pero generalmente el fondo es el mismo.

La apuesta de Feig es mostrarnos la adolescencia como nunca antes la habíamos visto en una serie de televisión. Que un chico se bese con la chica de sus sueños no tiene la menor importancia. Lo que nos enseñan es qué sienten sus amigos mientras lo hace.

La serie desde el punto de vista de los críos habla de la amistad, y desde el punto de vista de los jóvenes de la libertad. Pero Freaks & Geeks es sobre todo una serie sobre la diferencia. Sobre las decisiones que hay que tomar para vivir la vida que uno quiere, no la impuesta. Que uno sea más o menos listo no debería limitarlo. Es posible que en vez de matemático, el geek pueda ser guionista.


Los actores

La pregunta aquí sería ¿Quién no sale en Freaks & Geeks? proque madre mía, no existe serie en el mundo (bueno sí, Al salir de clase) que haya servido de trampolín para tantas estrellas juntas.

James Franco, Jason Segel, Seth Rogen (actor y guionista de la magnífica Superbad y parte esencial del equipo creativo de Apatow) y ¡hasta el mítico Thomas F. Wilson! son algunos de sus actores.

La cosa es que por la serie ha pasado gente como el hijo pequeño de Nancy Botwin en Weeds, con 3 ó 4 añitos y hasta un completamente irreconocible Sea LaBeouf.

La estupenda Busy Philipps, que aparció en las últimas temporadas de Dawson crece, aquí sí que se luce y en un capítulo la bellísima Rashida Jones, muestra su lado más macarra.



Todos los actores en esta serie están fantásticos pero los que se llevan la palma son su prota, Linda Cardellini, y sobre todo los 3 Geeks. Samm Levine, Martin Starr y John Francis Daley componen unos personajes riquísimos y son el alma de la serie. Seguramente no se conviertan en grandes estrellas, han participado como secundarios en algunas comedias (Martin Starr ha salido en Superbad), en series de televisión como Bones... pero que les quiten lo bailado. No solo son parte de esos millones de fans americanos que siguieron la única temporada de la serie. Ahora con la salida en DVD forman parte de la historia de todos los que podemos verla a destiempo.

Porque aunque la serie tenga 10 años, aunque las modas cambien, la adolescencia es una sola. Y esta serie habla de la adolescencia real, esa que todos hemos vivido, la que odiamos y amamos con la misma fuerza.

11 febrero 2008

¿Por qué me gustan?

Este es un blog de televisión, pero hay momentos en que uno tiene que salirse del guión. Y el momento es éste porque media blogósfera se saca los ojos y dar algún que otro arañazo siempre viene bien.

Cuando yo voy a ver una película como Juno o Cloverfield y me gustan, no las recomiendo. Lo que digo es "Me han encantado, no vayas a verlas". Porque sé como está el percal, sé que ni mi madre, ni mi cuñado, ni mi amigo fan de Bergman, van a disfrutar nada.

¿Por qué me gusta Juno?

A la pregunta ¿te gusta el cine independiente americano? yo debo contestar que sí, porque soy fan de Hal Hartley, de Jim Jarmush y realmente mi cinefilia se hizo en los 90 cuando gente como ellos eran la clave.

Una película independiente debería ser siempre una peli que no esté relacionada con los grandes estudios, pero hablar de género independiente como un estilo narrativo a mí particularmente me molesta mucho. Porque hay que saber diferenciar. Hay que saber cuando uno copia un estilo (Isabel Coixet) y cuando ese estilo viene dado por la falta de medios (Trust).

La propuesta de Juno queda clara desde el principio. Juno es un personaje. Es un personaje de cuento moderno, de comic, que va por la vida como tal. Es una adolescente de 16 años pero actúa como otra cosa, como un personaje. La propuesta no tiene pérdida. Desde los créditos se ve. Así que no puedes esperarte una historia realista (va por ti mamá). No puedes esperar que los personajes reaccionen como cualquiera de nosotros porque no son como nosotros. Juno nace y vive a través de la pluma de Diablo Cody, y eso queda claro desde el principio.

Pero es que Juno no intenta ser realista aunque cuente la historia de una adolescente accidentalmente embarazada. Todo lo contrario. Juno es un cuento y habla de la felicidad. Y en este caso, el "y vivieron felices" rompe todas las reglas anteriormente conocidas. No necesitamos un matrimonio para tener un bebé, con una madre divorciada tenemos de sobra (¿cómo pueden decir que esta película es conservadora? por Dios Santo!!!). Juno intenta que las cosas estén donde tienen que estar, intenta arreglar la vida de la gente para que todo encaje, pero se da cuenta de que uno no puede buscar la perfección, a la perfección te la encuentras. Juno no se acaba enamorando del niño que espera ¡No! No es su momento. Vanessa (jennifer Garner) quería un bebé, lo que no sabía es que no necesitaba a nadie más. Jason Bateman ha conseguido un loft en la ciudad y ese será a partir de ahora su lugar en el mundo. Y Juno seguirá viviendo su vida, aunque esta vez, casualmente, será una vida perfecta.



¿Por qué me gusta Cloverfield?

Cloverfield no es una historia de amor. Dejen de decir eso ya, por Dios. Cloverfield es una peli de monstruos pero es tan maravillosa porque detrás (esta vez sí, detrás) está la historia de amor. Y la película no sería nada sin esa cinta de video reciclada.

He leído por ahí que no te crees la película, que no te crees a los personajes. Los personajes son así a propósito. No son los héroes de World trade center, son gente normal, no son freaks, ni hippies, ni grunges, ni negros pobres del Bronx, no tienen nada que ver con lo que hemos visto hasta ahora en pelis de catátrofes. Son pijos, es decir, gente que normalmente no sale en las películas. No se trata de grandes abogados ni de ganadores. Es toda esa gente que no funciona como personaje porque a priori parece que lo tiene todo y nada que decir. La frialdad de este personaje es lo que hace que la película funcione. Porque todo esto que sucede en Nueva York, y que claramente está relacionado con lo que pasó el 11 S, le puede pasar a cualquiera, incluso a un pijo insulso como tú.

Tampoco es una peli de terror, aunque haya un par de escenas de mucho miedo (como la del túnel del metro, que sorprende a pesar de que se la ve venir, porque esa cámara seguro que tiene luz nocturna y a alguien se le ocurrirá de un momento a otro). Es una peli de catástrofes, esta vez con monstruo, que funciona, que te tiene en tensión durante hora y media y que a diferencia de cientos de pelis parecidas y esto es lo verdaderamente importante te emociona. La cosa es que la emoción la busca de una manera tan elegante, tan sutil y tan relacionada con todo lo que nos está contando, que convierte la peli en una joya. Y no como en "The Host" que era un sindios pretencioso, interminable y coñazo.


bye bye life

Cuando se muere una estrella de cine octogenaria no nos sorprendemos porque como hace siglos que no sabíamos nada de ella nos coge desprevenidos. ¿Cuántos hemos hecho la pregunta "Ah, pero no estaba muerto ya?"?. Porque no sé lo que tienen, pero las estrellas de la edad de oro de Hollywood llegan a los 90 años tan ricamente y claro, nos confunden.



El caso de hoy es completamente distinto. Esta vez se ha muerto el protagonista de una de las películas de referencia de nuestra generación. Si no he visto a Roy Scheider más de veinte veces en todos estos años matando al tiburón, no lo he visto nunca. y da igual cualquier cosa que haya hecho después. Siempre, durante todos estos años, aunque lo viéramos pasar penurias interpretativas, aunque no lo reconociéramos por sus exageredas operaciones de estética, para nosotros era Martin Brody. Y daba igual lo que hiciera, lo admirábamos por haber estado allí, por haber formado parte de nuestros mejores recuerdos cinéfilos, por haber dado ese grito y habernos emocionado siempre, cada una de las veces que veíamos la película. Hoy se ha muerto parte de nuestra historia y esta vez sí que era la nuestra. Pero lo bueno es que nos lo imaginamos cantando esa canción y acompañado por una belleza rubia muy parecida a Jessica Lange y de alguna manera, eso nos tranquiliza.

07 febrero 2008

Channel nº 4 se acaba para siempre

Si tuviera que elegir una palabra para definir a Channel nº 4 seguramente sería disperso. No creo que ninguno de sus creadores durante todo este tiempo haya estado lo suficientemente seguro del producto que quería ofrecer y de la estrategia que debía utilizar.

La propuesta al principio parecía obvia. Se intentaría recuperar al nostálgico y selecto público de Lo más plus y además los detractores del Tomate, que ya por aquella época pedían su cabeza, aceptarían con ganas una alternativa real.

El programa invitaría al debate y al petardeo del fino, que es el mismo, pero sin faltar. Más camuflado, más petardeo de sarao de feria de abril. Con colaboradores muy glamourosos, muy bien hablados y un plató super ideal.


La mujer spoiler

El primer problema vino con la pareja protagonista. Boris y Ana son completamente distintos, pero mediáticamente se trata del mismo personaje. No se complementan nada. Boris era pareja de Sardá, Ana de Schwartz. Y Sardá y Schwartz eran los tipos serios. Así que Ana y Boris no tienen ninguna gracia.

Cada uno por su lado es la pareja perfecta, el acompañante, el que necesita de un maestro que lo lleve y lo dome. En La ventana, Boris es uno de los mejores tertulianos que cualquier locutor desearía para su programa. Pero para eso está Gemma Nierga, para conducirlo por el camino correcto.

Ana y Boris no saben por donde ir. Se lian, sienten que deben rellenar cada silencio con comentarios de cualquier tipo, se cortan, se interrumpen, hablan a gritos. No escuchan a los demás, ni siquiera se escuchan el uno al otro.


Ana García Siñeriz, que es esa mujer a la que tuvimos que aguantar durante años contándonos los finales de todas las películas nominadas a los Oscar, no sabe escuchar. Piensa en lo que va a decir mientras el otro está hablando. A veces alguien le llama la atención, a veces un entrevistado está a punto de contestar si realmente se ha acostado con Mónica Cruz y ella antes de que el tipo lo diga ya le está preguntando otra cosa. "Pero si iba a contar que..." Se oye a lo lejos, y el programa sigue adelante. Nadie más habla de Mónica Cruz, se hace el griterío y entonces uno coge el mando a distancia.

Boris es un tío cultivadísimo, pero nada de eso se ve en su programa. Y no me parece mal, pero por Dios, no malgastes lo que tienes. Si tienes a un Boris, no lo hagas hablar de la familia Mccann, no me seas chabacano. Que conste que yo adoro a Boris Izaguirre, no van por ahí los tiros.

El programa tuvo tres momentos. La primera etapa era la más histriónica. Acababan de empezar y no sabían de medidas. Era imposible escuchar lo que allí se decía pero en cuanto a contenidos era estupendo. La segundo vino con el momento sensacionalista, que tocó fondo en verano con el asunto de Maddie y sus presuntos padres asesinos. Desde que los padres fueron acusados, el programa se entregó a la causa. Volvían de un parón veraniego (inexplicable con un año de vida) y se encontraron con "Está pasando" en telecinco. La única manera de recuperar al público que se había ido en manada a la basura era con más basura. Y sí que lo recuperaron. El suceso vende siempre.

Y por último llegó la etapa más triste de todas, que es la de la dependencia y la que hundió al programa a las cotas de audiencia más bajas de su historia. Empezó con el inicio de Fama. ¿A quién se le ocurrió que después de dos horas de reality alguien en su sano jucio podría querer quedarse en la cadena viendo otra vez cada una de las imágenes del programa anterior? Es de locos.

Además ellos promueven el debate desde su lado más frívolo. En Fama, por primera vez, lo de menos es la convivencia. Nos interesa más el baile. Si a Miguel le gusta o no le gusta Mary no tiene la menor importancia. No me interesa ni a mí, imagínense.

Lo peor es que todo resulta tan impuesto. Pero tanto. Están todos hablando de Fama con las mismas ganas con que yo limpio la bañera. Es que no hay debate. No van por ahí los tiros. Fama no se presta a eso. Al menos no de esa manera. ¡Es un programa diario!

En telecinco esto se ha aprovechado desde el nacimiento de GH, pero GH es un programa semanal. Aunque haya un resumen diario ¡¡de 20 minutos!! El programa es semanal, porque en la gala del jueves toda esa información que apareció durante la semana se vuelve a repetir. En Ana Rosa o en Crónicas, se aprovechaba el tirón de GH pero no hay color. GH permite que salga el psicólogo que todos llevamos dentro, esa gente se mete en una casa para que estudiemos sus comportamientos y analicemos cada frase y cada gesto. No hacen nada más que vivir para que nosotros los critiquemos. Ni cantan ni bailan. En AR cuando había debate de OT normalmente el día después de la gala, había un invitado y comentaban aspectos de lo que había pasado la noche anterior, incluso se votaba quién había cantado mejor o peor. Y esto tenía mucha gracia porque ¿qué oído puede tener Belén Esteban para decidir quien canta bien o mal?

En Crónicas Marcianas Sardá hacía todo un espectáculo sobre criticar a los concursantes de GH. Incluso Latre imitaba a los concursantes del programa. Y todo eso era divertido porque nadie se tomaba en serio ese debate.

En Channel nº4 el intento por hacer un debate serio es lo que lo vuelve patético. Además, una de las protagonistas del proceso es Karmele Izaguirre, la reina del corazón más rancio y clasicón que se ha visto en España. Así que todo resulta desagradable. Pero lo más importante, hay dos horas de Fama diarias. Es demasiado. No necesitamos más.

El bajón de audiencia de Channel nº 4 desde el comienzo de Fama fue brutal. Lo que yo me pregunto es ¿Ninguno de sus responsables ve esto? ¿Tan difícil es? ¿Era necesario terminar con el programa? Los que hacen televisión ¿Ven la televisión? Es tan sencillo como dejar de trabajar durante un par de días, llenar la nevera, sentarte en el sofá y coger el mando. A veces cuesta, pero no vean lo que se aprende.

03 febrero 2008

Mad Men

A priori esta serie pasaría totalmente desapercibida si no fuera porque acaba de ganar un Globo de Oro al mejor drama. Mad Men es una apuesta nada convencional de la cadena de cable AMC, y lo es porque la historia está ambientada en los 60 y porque no se trata de un drama al uso, de inquietantes conflictos, o largos misterios. Esto va de un grupo de hombres, llamados "mad men" que en la década de los 60 se habían adueñado de Nueva York. Trabajaban en las grandes compañías de publicidad de Madison Avenue (de ahí el apodo) y utilizaban su talento, su ingenio y su sentido común para vender cualquier producto o cosa susceptible de ser comprada. Ellos contribuían a esculpir la sociedad de consumo que todos conocemos, creando necesidades ilusorias y promoviendo formas de vida perfectas.



Y contar esto, a través de la mirada de quienes no son perfectos, es maravilloso. Mad men nos cuenta qué siente esa mujer que sale en una página entera de la revista Life sacando un suculento pastel de su nuevo horno General Electric, ese que promete que le cambiará la vida.


El protagonista es Don Draper (Jon Hamm), el director creativo de la agencia Sterling Cooper, un hombre que parece que lo tiene todo, pero que es completamente infeliz. Vive en un precioso chalet en el extraradio con su esposa y sus dos hijos. Lo acompaña en la agencia su Rat pack, un montón de niñatos con ganas de comerse el mundo, que tienen que lidiar constantemente contra aquello que sienten y aquello que se supone que deberían sentir.


Los guiones son realmente magníficos, ésta es una serie de personajes, y cada uno de ellos tiene tantos matices que cualquier decisión y cualquier comportamiento siempre resultan imprevisibles. Pero lo que te pone los pelos de punta es la brillantez de su puesta en escena. Mad Men tiene los mejores encuadres que he visto yo en una serie de televisión. Planos estáticos, contrapicados, personajes constantemente de espaldas, forman un trabajo puramente pictórico que está todo el rato en función de la historia. Y además, hay un complemento maravilloso y es la desmedida pasión de sus autores por uno de los grandes pintores americanos del siglo veinte: Edward Hopper.

La pintura de Edward Hopper ha servido de inspiración para cientos de películas, pero en este caso, la serie plantea exactamente la misma visión que tenía el pintor sobre el cambio en la sociedad de principio de los 40. En ambos casos coinciden las mismas ideas. La calma aparente y la soledad involuntaria.

Room in New York 1932

Mad men es una serie sobre el miedo al cambio, el cambio a una época en que los hombres y las mujeres podrán elegir aquello que les haga felices.

Y encima la banda sonora es deliciosa. El final del piloto reúne uno de los planos más estremecedores de la serie con una canción de My fair lady "The Street Where You Live". Y si todo esto no les parece suficiente no se pierdan la intro, que es una verdadera joya.



02 febrero 2008

LOST 4x01

La ilusión de ponerte el primer capítulo de una temporada de 24 capítulos no es la misma que la de hacerlo con una de ocho. Ayer todos nos sentíamos felices pero tristes a la vez. Mientras disfrutábamos del momento pensábamos, sí, pero dentro de 3 meses otra vez el parón ¿Vale acaso la pena? Gracias a Dios la respuesta fue sí.

Los primeros capítulos de la temporada siempre han intentado confundir ¿Se acuerdan de Desmond afeitándose en la escotilla? ¿De Juliet preparando galletas para su grupo de lectura? Sin embargo aquí esperábamos ver el mundo real y es lo que tuvimos. Que sí, que sorprendió saber que allí estaba Hugo, pero no ha sido ningún giro. ¿Significa eso que por fin van a empezar a explicar el final? ¿Que las cartas ya están todas sobre la mesa? Sabemos que van a aparecer los nuevos otros, los verdaderos otros y ese es el tema de la cuarta temporada. Pero me pareció que el capítulo de ayer fue una continuación de la temporada anterior. Y esto me preocupa, porque noto una diferencia brutal a nivel argumento, porque ninguna idea del capítulo de ayer fue nueva.


Que me encantó el capítulo ojo! Y grité como una loca en la escena de Jacob ¡Qué inquietante es esa cabaña por Dios! (El ojo era marrón, no azul, el de la ventana no era Locke!!!!) , pero todo lo que nos contaron lo sabíamos.

Esta temporada sin embargo sí que será distinta, porque por primera vez empieza una guerra de teorías que solo pueden seguir en este blog.