29 noviembre 2007

Desaparecida y otras cuestiones

Las audiencias de ayer llaman mucho la atención. Miren:

- "Hospital Central: Tolerancia cero”: 21.3% y 3.770.000

- “El Internado: La caja de música”: 19.8% y 3.491.000

- “Desaparecida: Día 22”: 15.7% y 2.990.000

Ayer en Digital plus había fútbol, quizás eso ha influido. Pero hay varias cosas que destacar, primero, que Hospital central bajara 4 puntos y que Desparecida bajara 3. Resulta que el miércoles de la semana pasada no hubo capítulo de esta última, así que es probable que su público durante su ausencia se enganchara a los misterios de Laguna Negra, o al chico sin ombligo, pero la verdad que El internado lleva varias semanas con el mismo 19% así que posiblemente se deba a otras razones.

Antes de hablar de Desaparecida me gustaría hacer unos apuntes sobre El Internado: laguna negra. No sé si se acuerdan de que durante la temporada pasada nos habíamos enganchado a esta serie porque nos la tomábamos como una comedia, pues esta vez ni eso, ha perdido hasta la gracia, es aburridísima. Además ha pasado una cosa que sirve para explicar uno de los principales defectos de las series españolas.

Les cuento. Resulta que la primera temporada acaba con un muerto. El cuerpo de un alumno es encontrado en el bosque y cuando se lo comunican al director, durante la cena, vemos que faltan casi todos los protagonistas adolescentes. Iván (el hijo de la Torné), Marcos (el gallego), Cayetano y Roque (lo que me ha costado encontrar los nombres de estos dos en Internet porque no me acordaba). Mientras ves eso, sabes que Iván y Marcos no pueden ser los muertos, porque sino una legión de niñas enloquecidas destrozarían las instalaciones de Antena3, Roque, el de Compañeros ni de coña se puede morir, por eso de la nostalgia, así que solo queda ese que sobra. Efectivamente el muerto es Cayetano.



Cuando encuentran al crío, aquello nos da igual porque la verdad que no sabíamos nada del personaje. Y eso que estamos en la segunda temporada. Nada emociona claro, porque ese chico nos sobraba desde el principio, sus frases de diálogo podían servir para él o para el extra que pasaba por allí, ni tenía presencia ni personalidad. Pero, se les ha muerto. Así que todos sus compañeros empiezan a hablar de él, y dicen cosas muy interesantes y le dan vida a un personaje que nunca la había tenido. Se deja caer hasta que estaba enamorado de Elena Furiase, de lo que yo no me había enterado. Y de pronto, crean un flashback en el que Héctor, el director, 12 años antes, le promete a Cayetano, que es un crío, que cuidará de él. Encima el que hace de Cayetano es el niño de El orfanato que se come la pantalla y tú te preguntas, pero esto qué es. ¿El tal Cayetano tenía un pasado? ¿Pensaba? ¿Sentía? ¿Y por qué no se ocuparon antes de que lo supiéramos?

Me he cansado de leer que toda la culpa de que los guiones sean flojos es de productores y cadenas que no hacen más que pedir cambios y distorsionar las ideas sensatas. Pero yo no me imagino a un productor tachando frases de un guión "Esto no, por favor, sirve para definir al personaje ¿es que te has vuelto loco? no podemos gastar una línea en un secundario de relleno". No, no me lo imagino, y no creo que pueda pasar nunca. Por supuesto que luego está la dirección, el actor, el montaje todo puede tener la culpa. Pero vemos un producto, y ese producto es lo que cuenta, no lo que queda en el camino.

La cuestión es que un personaje no necesita una escena para él solo para definirse. Una acción determinada, una frase, un gesto preciso son suficientes. Y no, que cuente que sus padres se van a separar ni lo define ni significa nada, es una frase en la boca de un actor.

Y haber perdido la oportunidad de emocionar con la muerte de un chico es bastante grave. Hay muchos errores y lagunas en esta serie, pero nada tan importante y sin embargo tan sencillo como eso.

Sobre Desaparecida tengo bastantes cosas que decir, aunque la verdad es que nunca me he enganchado porque me parece un poco aburrida. A ver... me voy a explicar. Creo que es la mejor ficción española que hay actualmente. Creo que uno de los culpables es Miguel Angel Solá, un tipo brillante capaz de levantar cualquier porquería. Sigo explicándome antes de que me acribillen a insultos. El otro día estaba viendo una escena de la serie. La verdad que la Sargento (Esther Ortega) que ayuda a Solá no me gusta nada, está siempre seria y con la misma cara de cabreo. No me gusta ni cómo habla ni me la creo dándole réplicas a su compañero, que encima es super natural al hablar (y que tiene que luchar contra un acento que le sale del alma, difícil de ocultar). Pues esta Sargento se reúne con un hombre, director de instituto, que le habla del sospechoso. Hace el típico interrogatorio, intenta sonsacarle algo al hombre que parece reacio pero que al final se decide a hablar. Entonces vemos algo que sucede mucho en la ficción española, digamos que es una constante, da igual el género, el formato o el estilo. Siempre pasa y se debe generalmente a 1) falta de presupuesto y 2) la manía de pensar que el espectador es gilipollas. Se trata de: La explicación. O lo que es lo mismo, que un pesonaje suelte una parrafada.


Así que suena el teléfono en el despacho de Solá, es la Sargento que le cuenta lo que ha dicho el director del instituto. Pero a ella no la escuchamos, solo a Solá que lo repite "Ah, que te ha dicho que el hombre había tenido un asunto con una chica de segundo de bachillerato, vaya, esto significa que había precedentes, muy bien, ah vale, que la familia de ella no denunció... claro no querían hacerlo público... el colegio tampoco, tiene sentido..."

Pero sucede una cosa, esto, que es costumbre en una serie común, aquí toma otro cariz. Es maravilloso de la boca de Solá. Todo este interrogatorio de mierda en aquella sala del instituto es aburrido y molesto, pero Miguel Ángel Solá lo convierte en arte. Créanme lo que les digo, dejen a este hombre solo en un cuarto con un teléfono y nos hace una serie maravillosa. No necesitamos más. Estoy convencida de que Solá es la razón de que Desaparecida sea tan buena. estoy convencida de que los matices de su personaje parten de decisiones personales más que de guión. Y lo sé porque lo intuyo, porque no veo nada de eso en los demás que son más bien de cartón piedra.

De cualquier manera, quiero decir que me parece un error el punto de partida de Desaparecida. Aunque nada más enterarme de su existencia me pareció una idea estupenda. Justo en medio de la hecatombe de Portugal y los Mcann, iba a empezar una serie sobre una niña desaparecida. Pero claro, de la realidad a la ficción hay abismos. Y esto no se ideó como un documental, sino como un culebrón. Cuando estamos en un trhiller con una chica desaparecida, aunque parezca extraño y suene a tópico (la tele necesita de tópicos sobre todo si estamos hablando de TVE1 y de prime time) sólo podía tener dos salidas: Que Patricia Marcos apareciera muerta en el primer capítulo, que no apareciera muerta nunca.

Lo que no puede ser, y el medidor de audiencias me está dando la razón, es que durante 6 capítulos buscaran a una chica viva y a partir de ahí, se convirtiera en un Twin Peaks. No, no puede ser porque hay esperanzas. Tenemos esperanza de que la chica viva y no pueden jugar con nosotros. Hay un capítulo en que aparece una prostituta muerta, creían que era la chica. No, no pueden hacer eso porque nos desentendemos.

Hay dos maneras de ver series 1) verlas porque te divierten sean o no comedias 2) verlas porque te enganchan.

Esta serie no entretiene como House o como Medium, no se trata de capítulos autoconclusivos que te sirvan para pasar el rato y desconectar, no, hay que prestar atención porque se trata de un culebrón. Entonces vamos al punto dos, el culebrón tiene que enganchar, tienes que querer ver el siguiente capítulo para no perderte un hecho determinado, por ejemplo, que se besen los protas de una vez (The office), que le quiten los brackets (Yo soy Bea), que se sepa si Ellen es o no culpable (Damages) y solo pensar en perderte esa información te obliga a estar ahí capítulo a capítulo. En Desaparecida ya no vamos a ver a Patricia Marcos viva. Y la trama detectivesca es taaaaan lentaaaaaa, pasan tan pocas cosas en cada capítulo y hay tan pocos giros, que uno puede decidir saltársela por semanas enteras que es lo que está pasando ahora mismo.

28 noviembre 2007

Algunos apuntes

Hoy toca entrada caótica, un batiburrillo, compendio de todo y de nada porque no sé muy bien de qué escribir. Tengo que terminar de ver la tercera de Weeds, la primera de Aliens in America y la indescriptible Flight of the concords para comentarlas. También quiero hablar sobre Medium, pero necesito datos, repasar algunas temporadas antiguas para hacer la entrada que esa serie se merece, porque es magnífica. Pasa desapercibida sí, pero lo es, créanme. Y lo es por la pasión de su equipo por innovar, por recorrer distintos géneros y por jugar con estilos narrativos dispares. Esta última temporada está siendo realmente estimulante.

Con esto de la huelga ahora mismo hay poco que ver y por eso nos hemos puesto con Weeds, que sabiamente la habíamos guardado para las vacas flacas. Con respecto a la huelga imagino que sabrán que después de la reunión del lunes hay rumores de que posiblemente se acabe todo antes de Navidades. Yo, que soy muy optimista me lo creo, pero me pregunto ¿y entonces qué? Porque si la season finale de Héroes es el capítulo 11 ¿qué significa? ¿Que empezarán entonces a trabajar en una tercera temporada para emitir en septiembre? No entiendo nada.

Y hablando de Héroes ¡Tiré la toalla! por fin, después de 6 capítulos dije "Esto no hay quien lo aguante". Pero les cuento como fue. Resulta que un día estábamos viendo un coñazo de capítulo con Hiro mandando cartitas al futuro a través de la Katana (esta idea es horrible y no hay por donde cogerla, qué pasa ¿que en 400 años nadie se dio cuenta?) y entonces sucedió algo, me quedé frita. Y esto no solo no me importó, sino que me alegré de no tener que seguir sufriendo esas escenas soporíferas. Ya, al día siguiente, aproveché que tenía sueño y le dije a mi novio "Pon Héroes", él super contento de poder ver su serie la puso pero no se imaginaba que yo la utilizaba para dormir. En cuanto acabó el capítulo me preguntó si quería verlo otra vez y yo grité "No!! no hace falta, que más o menos escuché algo". Mentira. En un momento se dio cuenta de que yo no tenía ni idea de nada de lo que había pasado en la serie así que me contó los giros argumentales. La verdad que algunos me gustaron, así que dije, venga, voy a ver un poco más, esto tiene que remontar. El problema es que todo era mucho más interesante en boca de mi novio que viéndolo en la tele. Me dormí a los 5 minutos (no se crean que siempre soy una marmota, es que llevo un par de semanas con antistamínicos). A él tampoco le gusta pero tiene esperanzas.

Me alegro de que por fin la irlandesa desapareciera del mapa y de que Hiro haya vuelto a la vida real. Y detesto más que nada en el mundo toda la trama de mohinder, el padre de Kirsten Bell, la propia Kirsten Bell (que penita más grande), nathan petrelli, Parkman, su padre, la niña, Silas y los gemelos... qué coñazo de gente.

Pero el descojono viene cuando de pronto aparece un capítulo de flashback. Como si hiciera falta. Como si aportara algo. Llega un momento, con tanto viaje en el tiempo sin ton ni son, que uno se pierde. Podrían haber pensado en una trama más interesante que esa del virus, porque ya habíamos visto que Nueva York explotaba, y si no lo hizo aquella vez, tampoco se quedará desierta.

En otro orden de cosas ayer me enteré de que Antena 3 prepara una serie llamada "Física y química" que va de un instituto. Por lo visto algo más natural y realista que Compañeros y con un casting de guapos y guapas que harán las delicias de las quinceañeras. La gracia de la historia es que está contada desde el punto de vista del profesorado que son todos jóvenes y novatos. Pero ojo con el punto de partida. Una profesora de 26 años se va de juerga y se lía con un chico de 19. Dos días después lo ve en el instituto ¡es su alumno!. Qué ¿Flipan o no? ¿A qué les recuerda? Novatos, jóvenes, guapos, polvo nada más empezar, sorpresa en el trabajo... Desde luego no hablo de plagio porque esa trama se ha visto en cientos de series. Pero canta, chicos, canta.

¿Y lo del alumno de 19? ¿se puede ser tan burro? De todos modos hay páginas que ponen que su edad es 17, pero me da que lo cambiaron, porque ahora ese tema es tabú. Pensar que en Rebelde Way, Mia estuvo como una temporada saliendo con su tutor que tenía como 26 años. Ella tenía 15 (actriz y personaje). En Argentina de toda la vida, una chica con 15 años es una mujer, y así se comportan. Cuando yo vivía allí lo veía natural, pero después de vivir tantos años en España, lo veo un poco locura.

Venga, ya que esto es un batiburrillo total, voy a dejarles regalos:

Éste para Ra, que sé que le encanta la moda. Vale, es Teri Hatcher ¿pero no sale preciosa?

Y esto es para Sisterboy, sobran las explicaciones.

Pues nada más por ahora, si les apetece leer mi artículo sobre el segundo capítulo de The office en Elitevisión, aquí está.

21 noviembre 2007

Damages

Normalmente con esto de las series yo soy precavida, siempre pregunto de qué va esto, cuantas temporadas son, cuántas llevan emitidas ¿se renovará? No quiero que me pase como a unos amigos que se engancharon a Reunion y luego se encontraron con que la serie terminaba en medio de la nada.

Así que después de mi cuestionario de turno me dijeron "Esta es una serie de una sola temporada" y enseguida dije "Sí, sí, sí, cien veces sí, éstas son las series que me van". Claro que en ese momento no me acordé de que Prison Break nació como una serie de 13 capítulos y luego pasó lo que pasó.

A partir de aquí hay spoilers de toda la temporada.

Bien, estamos en agosto y tenemos 13 capítulos por delante de Damages y según creemos ninguno más. Empieza el piloto con una mujer ensangrentada, bien, bien... aunque éstas cosas me ponen nerviosa, porque en este caso el flashback va a ser lo más largo y el flashforward hará de "flashback" ¿Me explico? (Noté enseguida que el flashforward sería lo más cortito porque era el de la fotografía rara). Cuando esto pasa rezas por que todo esté equilibrado. Con una actriz como Glenn Close equilibrar es fácil. Encima también estaba Ted Danson en un registro totalmente nuevo comiéndose la pantalla, así que la cosa no podía salir mal.

Me encantan las historias de cenicientas. Esto es muy "El diablo viste de Prada" y yo amo ese tipo de pelis. No sabemos como es Glenn Close, solo sabemos que es eficiente y aunque todavía no ha hecho nada malo hemos visto el futuro, Ellen se convertirá en una asesina por estar a su lado. Sentimos miedo. Ellen decide pasar del trabajo por asistir a una boda así que le gana la primera partida a Patty. Sin embargo Patty la contrata.



Hasta aquí todo perfecto. Pero a partir de este punto La cenicienta se convierte en Pedro y el lobo porque empiezan los giros, vamos a verlos:

-Patty despide a su ayudante Tom Shayes.
-Matan al perro de Katie, la testigo.
-Secuestran al hijo de Patty.
-Ellen es la cuñada de la testigo principal.

Todo esto está muy bien, pero es mentira, y la culpable es la misma persona.

-Patty no despide a Tom Shayes.
-Patty manda a matar al perro de su testigo.
-Patty manda a secuestrar a su propio hijo.
-Patty ha contratado a Ellen porque era la cuñada de su testigo.

Entonces, tenemos a una mujer capaz de hacer cualquier cosa. No hay sorpresa que valga a partir de ahora porque sabemos que será Patty la que ha provocado el lío. Cuando aparece el nuevo testigo, Gregory, sabemos que Patty lo sabe, y lo tenía pensado desde el principio. Cuando Katie comete perjurio, sabemos que seguramente Patty lo tenía calculado.

Por eso me desentendí de la serie después del tercer capítulo. Dije, esto no me va nada. Todo es demasiado previsible. Es el giro por el giro (que alguien me explique a qué venía que el hijo de Patty se fuera a un campamento).

Pero resulta que vino mi madre a pasar unos días a Madrid y pensé, Damages es una serie para madres, así que le conté los tres primeros capítulos y decidimos que durante esos 10 días lo pasaríamos pipa viendo la serie entera. No saben la alegría de mi madre cuando le conté, ilusa de mí, que era una serie de una sola temporada. Gracias a Dios gritó (ella también está enganchada a casi todo y todavía cree que Lost está a punto de caer, pobre).



A partir del cuarto capítulo, Patty se vuelve mejor persona. No se sabe lo que está planeando y eso me gusta. Una de las mejores escenas de la serie es la de la cena en casa de Patty y la sutileza con la que esa mujer intenta desestabilizar a la pareja invitada. Es estupendo también el lento proceso de metamorfosis de nuestra protagonista. Ellen va dejando su alma a un lado. El momento álgido y su gran escena es en el coche de George Moore, cuando a pesar de estar frente a un muerto, rebusca en sus bolsillos para encontrar las pruebas. Creo que la serie gana mucho desde que Katie, la cuñada testigo, se larga porque a partir de ese momento parece que todos están improvisando y es cuando empiezan los verdaderos problemas (que no me gustara la actriz supongo que también influye).

En este momento de la serie, que sabíamos que tenía que llegar, todo está equilibrado. Nos encanta el pasado, tanto como el presente. Había un problema sin embargo de empatías. Porque claro, Frobisher era una cabronazo por haber estafado a sus empleados. Pero ¿qué veíamos nosotros de Frobisher? Era un tío normal con su mujer y sus hijos. Tenía ese punto de locura, de putero, de drogadicto, pero nunca lo habíamos visto matar a una mosca. Era un personaje lleno de matices, ni del todo malvado, ni mucho menos bueno (Dios, Ted Danson merece un Emmy por esta serie). Pero supongo que cuanto más nos acercábamos al final, necesitábamos ver a una Patty más buena (el final tendrá que sorprendernos) y por lo tanto a un enemigo más malo. Entonces deciden que Frobisher escribirá una biografía (una salida sensacional) y se enfrentará con su escritor en una de las grandes escenas de Ted Danson, donde muestra su extrema violencia y su desequilibrio mental. Ese hombre es un cabronazo y necesitamos que Patty se lo cargue, cueste lo que cueste.


Pero no podemos evitar pensar en los desastres del primer cuarto de temporada. El Pedro y el lobo ¿se acuerdan?. Hay una chica que se enamora del novio de Ellen. Miente, dice que su abuelo ha muerto para ligarse al chico que le gusta. Roba las llaves de la casa y entra de vez en cuando a espiar a la pareja. ¿Como se les ocurre meter esto si no está relacionado con el caso? Es un engaño vil. Yo, que he visto muchas películas lo primero que pienso es "Es una mandada, tiene que ser un plan de Patty". Y por culpa de todas esas mentiras, pienso, ante cualquier duda, que tiene que ser decisión de Patty. Esto, claro, me hace perder la perspectiva.

Gracias a Dios, a medida que pasan los capítulos surge lo que se viene a llamar "el alma de la serie", que es ese pequeño milagro que compensa los malos momentos. Se llama Zeljco Ivanek y hace el papel del abogado Ray Fiske (me ponen otro Emmy para él, gracias). Este personaje es tan fascinante, que cuando aparece a una se le olvida el mundo. Su gran momento es ese sueño en que se le caen los dientes. Y él es consciente de todo el proceso, sabe que se está conviertiendo en un vampiro porque cuando te muerden ya no hay vuelta atrás.


Luego están los trucos baratos que claman al cielo, como que Patty se encuentre una gota de sangre en sus zapatos blancos. Al principio, cuando se ve los zapatos, no sabemos que Fiske se ha suicidado en el despacho. Creemos que esa sangre es del prometido de Ellen, que hasta el momento es el único muerto. Así que me resulta imposible imaginar que una mujer como Patty, se vaya a su casa, esté varias horas, haga la maleta para irse a la playa y no se mire los zapatos blancos, es imposible. Es una trampa, se mire como se mire.

Claro que todas estas trampas se pueden hacer porque ellos juegan con el tiempo, las informaciones nos las dan con cuentagotas y mezclándolas a su antojo. Todo es una trampa y entonces si te preguntas ¿funcionaría esta serie contada al derecho? Prefieres no pensar en la respuesta. Yo, de verdad, que no me suelo hacer esas preguntas. La estructura es la que es y punto. Pero te sientes un poco tonta, cuando descubres que te engancha más la estructura que el argumento. Que si no te ponen a las dos mujeres, sentadas en el sofá diciendo "No deberíamos haberlo hecho" cinco veces, tu interés bajaría enteros.

Pero ahora vamos al lío. A la resolución del enigma. Me parece sensacional que Patty haya mandado matar a Ellen. Las cartas estaban sobre la mesa. En ningún momento se dedicaron a ocultar que eran unos matones distintos. Por lo tanto han sido honestos. Otra cosa es que fuera previsible. Y lo era, porque no se olviden de lo que les decía antes "Siempre es Patty". Cruz que no se supieron quitar de encima y eso que lo intentaron.

Me parece maravilloso ese final en la playa. Ellen en primer plano, dejando a su jefa al fondo, lejos, sola, pequeñita. La evolución - bajada a los infiernos- de Ellen es fantástica. Y yo me hubiera sentido feliz de que la serie hubiera terminado así. Pero una semana después me enteré de que había una segunda temporada. Y el júbilo se convirtió en desdicha.

No me interesa nada más de estas mujeres. Patty es una asesina ¿Qué más tengo que saber? La historia para mí se acaba en el muelle. Ellen ha aprendido de la maestra, ya es como ella y la va a hundir. A partir de ahora todo lo demás es un pegote. No dudo que estos guionistas puedan hacer una temporada incluso mejor que la primera. Esta gente puede hacer cualquier cosa. Pero la historia de Patty y Ellen, esa gran historia de interés, de madurez y de traición se terminó en ese muelle. Y cuando algo muere, mejor que no lo resucites porque se vuelve un engendro.

Más Damages aquí y aquí.


20 noviembre 2007

LLueve

Últimamente estoy de un apagado... No he escrito nada no porque no tuviera ganas, sino porque estoy en esos días que dices "¿para qué? si seguro que me sale mal". La culpa la tuvo un guión que escribí para Notodo y que nadie ENTENDIÓ. Pasa el tiempo y no tengo ni una sola idea, qué desastre. Si a alguien se le ocurre algo prometo ponerlo en los créditos, siempre que quepan claro, que el corto solo puede durar tres minutos y medio. Eso sí, tiene que ser en exteriores pero en zona verde, preferiblemente Casa de campo, dos personajes, rollo cotidiano, o sea, ni sangre ni disfraces. Atrezzo ni de coña. Trípode tampoco. Si pudiera ser comedia sería perfecto. Sin persecuciones ni mucho movimiento que esto una vez comprimido va a saltos.

El hecho de que llueva en Madrid no me produce ningún efecto negativo, todo lo contrario, porque yo adoro la lluvia y la prueba es que ahora estoy escribiendo. Normalmente tengo la persiana cerrada porque no hay nada que me moleste más que el sol dando de lleno en la pantalla y además, se ve todo el polvo. En cambio ahora la he subido hasta arriba e incluso he abierto la ventana porque me encanta el olor a lluvia y sobre todo disfruto pensando que hoy no tengo que ir al gimnasio.

Lo bueno de los períodos de crisis es que sabes que después vienen los de esplendor. Y yo sé que el mío tiene que estar a punto de caer. Mientras tanto, Tina Fey me ayuda.

Hemos visto los 5 capítulos de la nueva temporada de 30 Rock este domingo. Qué maravilla de serie. Qué capítulos tan perfectos. Hay un momento de Alec Baldwin ¡tan grande! Tracey tiene traumas infantiles por culpa de un padre que lo abandonó y Jack lo convence para ir a ver a una terapeuta. La terapeuta propone un ejercicio para que Tracey se enfrente a su pasado, tendrá que hablarle a su padre imaginario que estará sentado en una silla vacía. Tracey no puede hacerlo así que Jack se hace pasar por su padre y entonces empieza un show en el que Jack hace de padre de Tracey, de su madre, del amigo blanco de su madre y del propio Tracey, que disfruta como loco con el espectáculo mientras la terapeuta intenta que se detengan y se centren en el ejercicio original. Alec Baldwin hace cinco papeles en menos de un minuto y yo en ese momento tiemblo de solo pensar que pueden ser reales los rumores de que deja la serie.



En esta temporada Jane Krakowski tiene mucho más papel, que ya era hora y gracias a Dios Will Arnett vuelve a salir. Vean todo lo que pasa en uno de los mejores capítulos de la serie: Greenzo. ¿Han leído lo de Harry Potter?!!!!

Sin duda, el gran personaje de la serie es Kenneth (es absolutamente genial la presentación de ese submundo de botones de la NBC que arreglan sus diferencias con letales concursos de trivial) y toda la trama de su fiesta anual es brillante. (No quiero chafarles el gag así que deberían dejar de leer si no han visto el capítulo) Durante todo el capítulo te van contando todo lo que va a suceder en la fiesta y cuando hay tanta expectación generalmente lo que se ve al final, es lo opuesto a lo que uno imaginaba. Pero esto es 30 Rock, y ellos dan todo lo que promenten. Además no pueden guardarse cosas para contarlas en Off, gracias a Dios no se distinguen por su elegancia. La fiesta se ve pero lo maravilloso es lo que se intuye. "Lo siento mucho Grizz" es lo único que nos dirá Liz Lemon. Pero es tanto lo que podemos imaginar que el gag se hace inmenso.

¿Les he dicho que he visto Damages? Sí, se merece un post entero. Prometo hacerlo mañana, así recupero el ritmo.

14 noviembre 2007

Elitistas, piqueteros y gominolas (Actualización)

¿Sé o no sé de televisión? No! Digan ¿Sé o no sé? ¿Qué vaticiné? Que Gominolas se iba a olvidar de su premisa, que la habían cagado en el piloto y que no se veía nada en el horizonte. Y eso fue lo que hubo: 20 minutos de nada. Estos chicos podían ser cantantes infantiles o marines.

¿Tan difícil es? Ya no solo escribir una buena Biblia ¿Tan difícil es leerla? porque si yo leo las sinopsis de los capítulos y veo que en el segundo no hay NINGUNA referencia al grupo musical le preguntaría al prodcutor ejecutivo si es que a alguien se le ha olvidado algo. Supongo que doy por hecho que las cadenas leen y ese es mi error.

Siete puntos menos que el martes pasado ¡SIETE! La gente no es idiota.




Por otro lado les cuento que tengo el honor de participar en la web de Elitevisión y hoy pueden leer mi análisis sobre el primer capítulo de The office. El proyecto de Elitevisión nace con la intención de revolucionar el concepto de blog de televisión y pretende analizar las series en detalle, capítulo a capítulo, en contra de lo normal, que es hacerlo por temporadas o por series completas. Es un trabajo mastodóntico hecho desde la pasión de unos cuantos que están bastante pirados. No dejen de visitarla.


Y para terminar quería hablar de los putos guionistas. Ups, me sale el adjetivo solo, perdón. No, en serio, adoro a esos chicos y acepto su postura. Merecen esos céntimos y mucho más, porque son los culpables de que las series sean tan maravillosas. Gracias a ellos a lo mejor Lost no empieza en febrero del 2008, sino del 2009. Por ellos seguramente no podremos ver más de 5 episodios de Ugly Betty hasta octubre de 2008. Benditos guionistas.

Ahora en serio, por lo visto la ABC ha confirmado que Lost se echará en febrero de 2008, el 2 para ser más exactos es la premiere en una playa de Hawaii. Hay grabados 8 capítulos y eso es lo único que se pondrá. El resto de series, los capítulos producidos, los que quedan por emitir, se puede ver en este calendario.

No hay mal que por bien no venga. Uno puede recurrir en enero a ver las 3 temporadas enteritas de Anatomía de Grey. Yeah! ¡17 millones de personas no pueden estar equivocadas! y con paciencia uno se engancha a cualquier cosa.

Yo quiero pensar que todo se resolverá pero soy una pesimista. Igualmente voy a aprovechar para ponerme al día con series que he dejado de lado como The wire, The shield, The sopranos y el 2008 se pasará en un plis plas y volveremos a disfrutar de nuestra televisión favorita hasta que los directores artísticos se pongan en huelga porque esto es un no parar, créanme, que imprescindibles son todos y en 20 dólares entran muchos céntimos.

Les dejo un regalo. Jack Bauer en el 94. No se lo pierdan.


Otro regalo, un video sobre el día a día de un huelguista en Hollywood. Es fantástico.

08 noviembre 2007

Gominolas

Cuando uno tiene una idea, una idea genial, de esas revolucionarias que tenemos cada dos por tres mientras hacemos las cosas menos inspiradoras, se siente de lo más contento. Incluso hay gente que no ha escrito un guión en su vida pero alguna vez ha tenido LA IDEA. El problema cuando te encuentras con esa idea genial que va a cambiar la historia del audiovisual en tu país y en varios más, viene al contarla: "Esto va de dos hermanas que están andanado por el Retiro y se encuentran, detrás de un matorral, con un cadáver", es entonces cuando tu interlocutor te hace la pregunta fatídica:

- ¿Y?

Ese "¿y?" viene a ser como la muerte de la idea, la convulsión de las musas y la definitiva pérdida de la autoestima.

- ¿cómo que y?

- Dos hermanas, un muerto ¿y?

- Jo, pues no sé... eso luego.

- Ah pues cuando lo sepas me lo cuentas.

A mí me han dicho muchos "¿y?" y la idea ha pasado a mejor vida. Yo he dicho muchos otros y he roto un montón de corazones. La vida es así. Hay que saber enfrentarse a los "¿y?".


En "Gominolas" a uno se le ocurrió una idea fantástica "¿Se acuerdan de los Parchís? pues estos son los Gominolas, eran un grupo de éxito de niños y ahora son unos desgraciados".

Si ese señor me hubiera contado esta idea yo le habría preguntado "¿Y?" y supongo que su cara habría sido un poema.

Y es lo que me pregunté nada más terminar el capítulo. Este problema lo tienen una de cada 2 series españolas. Piensan a muy corto plazo. La idea del grupo infantil se agotó en el primer capítulo. Es lo mismo que pasó con Siete vidas y el coma de Toni Cantó.

Y ya que hablo de Siete vidas voy a poner un ejemplo. Resulta que ahora mismo hay una serie llamada "Samantha Who", de la cadena ABC, que va de una chica que ha pasado en coma una semana y se despierta. Ustedes se preguntarán "y?". Pues les cuento, resulta que después del coma sufre amnesia y su personalidad es completamente distinta a la anterior al accidente. Así que descubre que tiene que lidiar con gente a la que desprecia y que ha perdido a gente que ahora le cae bien. Y eso es un conflicto, porque ella tiene una vida, pero la odia. Ahí hay una serie. En "Siete vidas" que Tony Cantó se despertara del coma es tan anecdótico como que Gonzalo fuera camarero. Y el tiempo me ha dado la razón porque el tema se agotó en 3 capítulos.

¿Qué puede pasar ahora en Gominolas? ¿Alguien se imagina de qué va a ir? ¿Qué tiene de atractivo?

Puede pasar que se preparen para ser famosos (ya lo han hecho en el piloto, entonces habría que decir "otra vez") o que simplemente fueran cuatro amigos desgraciados (Friends desde el esperpento). La cosa es que no se ha visto -ni se vilsumbra- el gran conflicto que esta idea necesitaba y es "La reacción del mundo ante esta reaparición". El choque entre los 80 y el 2000. ¿Qué opina la gente? ¿Los conoce si los ve paseando por la calle? Si mi prima y yo nos encontráramos un día de estos a Tino comprando en El corte inglés nos pondríamos a los gritos y hasta le haríamos cantar una estrofa de "En la armada".

Pero bueno, supongo que habrá que esperar. Yo realmente no imagino cómo va a seguir. La cosa es que de solo pensar en ver otro capítulo de esta serie me dan todos los males, porque lo más importante de todo esto, lo único importante, es que los actores están muy mal (mención especial a Tejero, que debería dejar de imitar acentos y hacer lo de siempre), que en el esperpento la diferencia entre la comedia y el drama pende de un hilo que jamás se debe romper y aquí lo hace cada dos por tres, su poco sentido del humor es zafio y aburre tanto que duele.

Lo de la muerta como narradora... no merece comentarios.

06 noviembre 2007

La tomadura de pelo de Life on Mars

Yo no soy masoquista ni me sobra el tiempo. Esta serie no me gustaba y por eso no la vi. Pero una cosa no quita la otra, soy una chica curiosa y no me podía quedar sin ver la resolución del enigma. Así que me salté casi dos temporadas y me fui directa a la season finale.

Resulta que cuando uno está en un bando lo defiende hasta la muerte, ríe las gracias y ve cosas donde no las hay. Es lo que tiene la pasión. A ver, fans, escúchenme, si a JJ Abrams se le ocurriera por casualidad hacer este estropicio con Lost, habría muertes. La gente se levantaría por ciudades enteras y habría destrozos, en serio. No me sean caprichosos y reconozcan que el final de Life on Mars es el jarro de agua fría que ningún espectador se merece. Es el colmo de la inocentada. Todos ustedes son víctimas de desalmados que no tenían ni pajolera idea de qué iba a pasar en esa serie 30 páginas más allá.

Analicemos los hechos. Sam Tyler tiene una novia que es secuestrada por un asesino en serie, tiene un accidente de coche y despierta en 1973. Oye voces que dicen que está en coma. Aparece un hombre al final de la segunda temporada llamado Morgan que le comunica que lo sacarán de allí, que lo único que tiene que hacer es incriminar a los polis con los que lleva dos años conviviendo. En ese momento le digo a mi novio ¿A que este tipo es el médico? ¿A que va a ser verdad que está en coma?



Se despide de la chica del pelo cardado algo triste. Pienso que se habrán liado ya, pero me dice mi novio que eso nunca sucedió y yo creo que esto ya no es tensión sexual no resuelta, pero sí caducada. Vamos, no se puede tener a estos dos dando vueltas y no mostrar ni un mísero beso en dos años.

Entonces llega la misión especial y yo me fui a planchar porque hasta que llega el climax dan una de vueltas... y de pronto sucede lo inesperado. El tal Morgan le cuenta a Sam que de pequeño se ha dado un golpe (o un tiro, qué sé yo) y eso le ha provocado un problema cerebral serio. Entonces es policía claro, pero en realidad no se llama Sam Tyler, ese es el nombre que utiliza como espía. Es decir, que de futuro nada.

Bien, pensemos por un momento en esto. Si este señor no ha viajado del futuro ¿cómo es que sabe quién es Tony Blair? ¿Es vidente también? Por tanto el giro como tal no funciona. Es simple relleno. Nos están engañando. Así que me aburro. Quiero que llegue la conclusión real.

Durante el tiroteo final Sam, que ha decidido no perjudicar a sus compañeros, tiene la opción de elegir. O sigue adelante y vuelve al futuro o salva a sus amigos de las balas enemigas.

Elige seguir, así que despierta del coma. El tal Morgan es su médico como yo presagiaba. Sam se despierta y vuelve a la vida. Pero la vida es horrible, fría y aséptica. Hasta el punto de que ni siquiera pregunta por su antigua novia. ¿La habrá devuelto el secuestrador? ¿Se la habrá cargado? Qué más da. No estamos en el 73 y estamos tristes. ¡El presente no tiene ni la menor importancia! Entonces llega mi parte favorita, la de las canciones enteras de David Bowie. Ponen Life on Mars otra vez y una sabe que hasta que no acabe la canción no habrá conclusión alguna. Yo estoy segura que este hombre se suicida porque qudaba bonito con la canción. De haber sido otra, seguro que la serie hubiera tenido otro final.

Interminable Life on Mars y también interminable Changes, que la tengo en mi Ipod pero me da que voy a terminar odiándola porque menuda manera de gastarla.

Entonces, conclusión: El hombre estaba en coma, como pensábamos. Menudo sorpresón. 1973 es un universo paralelo donde se va cuando uno se muere (o para los más pesimistas es su cielo particular). Vale. Es una decisión de mierda.

Pero... ¿Y ese suicidio? Qué coño significa?? Y su novia ¿por qué no va a buscarla? ¿Es que ya no le interesa la policía cuando no da palizas? ¿No le va el rock actual?

Denme bien fuerte. Aguantaré estoicamente. Este post en realidad lo he escrito para que se llenen de orgullo y hablen de su serie, que sé que la aman a pesar de todo y eso los honra.

Aquí les paso la versión de mi novio, que es prácticamente la misma, pero con conocimiento de causa.

04 noviembre 2007

Nip tuck 05x01

No lean si no han terminado de ver la cuarta temporada. Dios ¡¿cómo es que no han terminado de verla?!

Ay qué feliz estoy de que haya vuelto mi Christian. La cosa pintaba super bien de todas todas porque esos hombres ya habían conquistado Miami y merecían llegar a lo más alto. Yo me imaginé al Doctor Troy tirándose hoy a Jennifer Aniston, mañana a Jessica Biel, pasado a Paris Hilton. O sea, que me esperaba lo mismo de siempre pero con mucho más glamour. Y qué pasó? Que no di ni una, siempre imagino todo lo contrario a lo que pasa, y no es que sea culpa mía, es que esos guionistas son la leche, tienen la manía de escribir cosas totalmente imprevisibles.

A ver, recapitulemos: Sean Mcnamara había cortado con su mujer, es más, por desgracia sabemos que no va a volver con ella hasta que cumpla los 60, de pronto decide dejar la consulta, hasta que recupera la cordura y apuesta por irse a Los Ángeles con su amigo. Christian, que se había redimido un poquito (no vamos a exagerar tampoco), se larga con su hijo adoptivo y ya es totalmente libre gracias a Dios (qué mal me caía la negra).

Bien. Una piensa, llegan a Los Ángeles y rompen la pana. Casi. El capítulo empieza con una consulta absolutamente ideal pero totalmente vacía. Los amigos juegan al baloncesto en la sala de operaciones, no hay ni un cliente desde hace 3 meses. Christian tiene una idea: salir a cazar mujeres. Pero claro, no se fija en esas actrices delgadas, jóvenes y bellas. Los ojos se le van a la más vieja del lugar, que no es otra que la estupendísima Lauren Hutton. Porque cuando se trata de placer es una cosa pero cuando se trata de trabajo es otra muy distinta.

Descubren que no les va a ser fácil abrirse camino en la ciudad de Los ángeles, porque por más prestigio que tengan, un cirujano plástico no es nadie si no ha operado al menos una vez a una verdadera celebrity.



Y aquí es donde vienen los spoilers y las sorpresas. Resulta que les ofrecen asesorar a los responsables de una serie de televisión sobre UN CIRUJANO PLÁSTICO SUPER GUAPO QUE NO HACE MÁS QUE FOLLAR interpretado por Bradley Cooper. La serie se llama "Corazones y escalpelos"!!!!! y con ella hacen un viaje metalingüístico total que les sirve para reírse de sí mismos, para hacer autocrítica, para tirarse flores y para demostrarnos que sigue siendo la serie más cachonda de la televisión.

¿Se acuerdan del capítulo de los labios de chocho? Una mujer que ha tenido un accidente en la boca, tiene que recomponer sus labios con los labios de la vagina y aprovecha esto para darle una lección a su marido que no era muy amigo de visitar ciertas zonas de su cuerpo. La cosa es que leído así suena fatal, claro, porque todo en esta serie es muy surrealista. Pero Nip Tuck lograba contarte esto y mantener el equilibrio entre lo cómico de la situación y el drama de los personajes.

Y éste es el capítulo que van a usar para la primera colaboración de los doctores en Corazones y escalpelos. Para esto se traen nada menos que a la indescriptible Jennifer Coolidge que yo solo con verla me descojono, le ponen una prótesis en los labios que parece hecha de plastilina y le hacen decir, como si balbuceara el hombre elefante, que ella no piensa decir "chocho".

El director de la serie (espectacular Oliver Platt) es toreado por un protagonista malcriado hasta que el doctor Macnamara pone las cosas en su sitio, a este actor nadie más le va a dorar la píldora, se acabó tanto caprichito.

Y entonces sucede el milagro. En Hollywood, la ciudad de los sueños, donde todo puede pasar, Sean Mcnamara gana la batalla por primera vez al doctor Troy. Christian pasa a un segundo término. ¿Quién lo iba a decir? Al final se repite el partido de baloncesto (en el primero Christian era el que encestaba) pero esta vez la paliza se la dará Sean.

Christian tiene que volver a sus orígenes. Tiene que volver a ser un cabrón. Es su naturaleza y qué coño, es como nos gusta.

Durante el capítulo además protagoniza una de las escenas más crueles que recuerdo. Acaba de acostarse con Daphne Zuñiga y están juntos admirando una foto gigante de ella hace 20 años. La foto está hecha por un fotógrafo prestigioso a quien Christian admira y ella tiene cuerpo de infarto y cara perfecta. Entonces le pregunta "crees que tengo que hacerme algo para repetir esta foto". Está claro que es una pregunta que busca solamente una respuesta, la misma respuesta que el Doctor dio en la consulta "No, no necesitas hacerte nada". Sin embargo aparece el verdadero Christian, le pide un lapiz de labios y con él empieza a marcar la foto, desde los pies a la cabeza. Sin titubear, sin remordimientos, con escalofriante frialdad. Sabe que la batalla la ha ganado, ella está completamente a sus pies.

Pero además el metalengüaje gira sobre sí mismo porque no solo estamos hablando de Christian Troy mirándose en el espejo sino de Julian Mcmahon dándose un repaso. Porque el que se está quedando calvo no es Christian, es Julian. Y el tío con toda la tranquilidad del mundo se presta a mostrar sus entradas tal como son, dejando que le hagan al Doctor un transplante de pelo. Chapeau por Julian y chapeau por Ryan Murphy y todo su equipo. ¡Adoro esta serie!